martes, septiembre 12, 2006

Vulnerabilidad

Circular por las calles, ya sea manejando o caminando es un acto de confianza, ya que todos suponemos que el resto va a cumplir con las normas del tránsito y que anda manejando en condiciones óptimas.
Sin embargo, no siempre es así.
Ayer en la tarde chocaron el jeep de uno de mis hermanos, quien junto a sus hijos y su pareja, se encontraba a un par de cuadras de su casa.
Un imbecil, manejaba curadísimo y se estrelló por atrás contra el jeep, lanzándolo contra un poste, con lo que los niños salieron volando, resultando uno de ellos con un corte en la cabeza que necesito puntos y el otro con la nariz quebrada, por lo que tendrá que usar yeso.
Cuando supe lo que había pasado, la sensación de vulnerabilidad fue increíble, saber que a los niños con lo que había estado jugando el fin de semana, fue tremenda.
En general, la relación con mis hermanos siempre ha sido distante, pero saber que les pudo haber pasado algo fue demasiado fuerte.

3 comentarios:

Marlencita dijo...

Pucha Oscar....lo siento harto...Ojalá que los niños se recuperen pronto de sus heridas físicas y sicológicas que, seguro tendrán a causa del accidente.
Un abrazo.......y es verdad, la impotencia ante estos hechos, enoja....Imagino que el %$/&%/&& será sancionado...
Chaus.

Cristy dijo...

puuuuuucha!!!!...es como para ponerse a pensar....a meditar sobre los fràgiles que somos... todo pasa...menos mal fue sòlo un gran susto...un abrazo...y a replantearse el vìnculo con los hermanos ...siempre es bueno...

Marlencita dijo...

Holis...........
Chaus.