Como cada año, el primer semestre universitario y ahora secundario, se convierte en un tira y afloja con el gobierno y con quien sea, en que los estudiantes buscan mostrar la fuerza de su movimiento y tratar de lograr sus demandas, muchas de las cuales son totalmente justificadas y debieran ser parte de nuestro sistema no mas.Hace un par de años, los estudiantes de arte de la Universidad de Concepción, cubrieron la Casa del Arte con miles de bolsas de supermercados, pegoteadas unas a otras. Este Año, la Casa del arte fue cubierta con plastico negro, como de muerte. El arte estaba de muerte o esa fue mi impresión. Aun así, el impacto visual no fue el mismo de la vez anterior.
Tiempo después, el 12 de junio, cuando el conflicto ya estaba próximo a terminar, al mirar por la ventana, vi como muchos estudiantes colgaban de los cables de la electricidad una serie de formas hechas con papel de diario a manera de guirnaldas y que se extendían desde muy lejos y tampoco se veía hasta donde llegaban.Como la curiosidad es mas fuerte, sali a ver de que se trataba y resultó que las guirnaldas eran la típica forma de niños, uno al lado del otro,.
Seguí las guirnaldas hasta la universidad, donde habian colocado una especie de malla que para mi simulaba una tela de araña.Las guirnaldas se extendían casi desde el foro hasta la escuela de musica (en Beltrán Mathieu), lo que en ese momento se denominó la Ruta del Arte.
Me gustó lo que en ese momento hicieron y me recordó lo que dice Jodorowsky, con respecto a estas puestas en escena o "acto poético".
