Termas dieciocheras

El reporte dieciochero está de lo mas variado...

Partió el día viernes con el asado de la oficina, así que las actividades laborales se interrumpieron muy temprano (onda 11 de la mañana) para hacer las compras de rigor y comenzar los festejos patrios, que se prolongaron hasta como las 20 horas con algunos personajes con los ojos flotando en tanto copete ingerido...

El sábado partí con mi hijo Diego (la pali tiró pa' las moras) y un primo con su hijo a las Termas. El día estaba espectacularmente despejado, muy lindo. Llegamos como a las 10 y la hicimos muy corta con los preparativos, la idea era aprovechar el día y si que lo aprovechamos.

Mis anteriores deslizadas, habían sido sólo en la cancha de los tontos (novicios), no había salido de ahí y ahora logré bajar una pista que se llama "bosque nevado", dándome cuenta de que me estaba perdiendo muchas cosas. A la subida, junto a Diego, la infaltable foto. Son muy buenas las fotos de sombras.

Pero el día tenía preparadas mas sorpresas, como la "mini cumbre blogger" con Pepinot, que llegó a las Termas a pasar el 18 y a deslizarse hábilmente sobre la nieve (para muestra, la foto) y con quien ya habíamos coordinado el encontrarnos allá. Que les puedo contar de ella, que no hayan sentido al leer su blog, cualquier palabra se queda corta.

Mas tarde, Diego quiso esquiar, así que me dejó con su tabla.... pensé que iba a ser un rato corto, pero no, después de media hora ya estaba medio aburrido, así que había que probar eso del snowboard. Les puedo contar que es espectacular, lejos mejor que el esquí, la sensación es increíble y la adrenalina obtenida es mucho mayor. Los porrazos fueron bastante pocos (varios vistos por Pepinot. eso si), los dolores posteriores soportables, así que el cambio a la tabla se viene.

El resto del fin de semana fue netamente familiar. El domingo en la casa de mis papás, a pegar en la pera con el asadito y jugar con los sobrinos y el domingo a elevar volantines un rato, mientras se mantenía el viento y seguir descansando.